Esta residencia consta de tres niveles. El objetivo era aprovechar al máximo los espacios sin sacrificar la funcionalidad y estética del proyecto. Debido a las restricciones del fraccionamiento y las características del terreno (ubicación, orientación y topografía) se optó por generar una serie de volúmenes intersectados entre sí, que permitieran el paso de la luz del sol y la circulación de los vientos por la casa, ya que la fachada lateral se encuentra hacia el poniente, hacia un área verde de donación del fraccionamiento; cabe señalar que en verano las temperaturas pueden ser muy altas, es por eso, que prácticamente anulamos el uso de ventanales hacia esta fachada. La creación de elementos arquitectónicos que ayudaran a disminuir la sensación térmica de la casa, fue muy importante. Al interior del vestíbulo principal, la casa cuenta con un jardín interior que llena de luz y frescura el espacio en los tres niveles, aprovechando la luz cenital, pero evadiendo el acceso de los rayos solares directos.
En la fachada principal podemos apreciar una serie volumetrías que dan la sensación de que la casa esta en constante movimiento, además de que generamos un juego de sombras que se desplazan conforme al sol. Cada espacio dentro de la casa, va invitando a los usuarios a recorrerla y disfrutarla mediante el uso de remates visuales, pérgolas, jardines interiores y exteriores, así como elementos que evocan paz, tranquilidad y privacidad.
